Un reciente estudio realizado elaborado por un equipo de investigadores del Centro Nacional de Oceanografía de Inglaterra afirma que el color de los océanos está cambiando de su habitual color verde a una llamativa tonalidad verde, como consecuencia del cambio climático.
El estudio se centró en las regiones tropicales y subtropicales, excluyendo las latitudes altas, oscuras durante parte del año, y las aguas costeras, donde los datos son naturalmente muy ruidosos, en tanto que el equipo liderado por el científico B. B. Cael, analizó los datos que obtuvieron gracias al instrumento MODIS (Moderate Resolution Imaging Spectroradiometer) del satélite Aqua de la NASA.
Así, lograron determinar que el 56% de la superficie marina mundial ha sufrido un cambio significativo de color en los últimos 20 años, a la vez que detectaron que las zonas cercanas al ecuador son cada vez más verdes, demostrando los cambios de sus ecosistemas.
“Esto es un claro reflejo de que hay más clorofila, la cual es responsable de la fotosíntesis del fitoplancton que tiene un papel crucial en la captura del dióxido de carbono”, señaló Cael.
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Los especialistas también detectaron una tendencia en el color del océano que, si bien ya se había predicho mediante modelos climáticos, se esperaba que tardaría entre unos 30 a 40 años en detectarse mediante estimaciones de clorofila por satélite,
“En este momento, es difícil decir qué cambios ecológicos exactos son responsables de las nuevas tonalidades. Sin embargo, podrían ser el resultado de diferentes ensamblajes de plancton, más partículas detríticas u otros organismos como el zooplancton”, comentó Cael.
“Es poco probable que los cambios de color procedan de materiales como plásticos u otros contaminantes, ya que no están lo suficientemente extendidos como para registrarse a gran escala. Lo que sí sabemos es que en los últimos 20 años el océano se ha estratificado más“, agregó el investigador.
Por último, los especialistas confirmaron que el satélite PACE (plancton, aerosoles, nubes y ecosistemas oceánicos) de la NASA, cuyo lanzamiento está previsto para el próximo año, llevará a cabo una gran cantidad de estudios y realizará observaciones con una resolución de color mucho más precisa, con el objetivo de obtener más información sobre la ecología de los océanos, la diversidad de especies de fitoplancton y sus tasas de crecimiento.