La idea de crear una Moneda Digital Argentina (MDA) se sumó a la ya cargada agenda electoral de la mano del ministro de Economía, además de candidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa. Sin embargo, mientras algunos consideran que podría ser beneficiosa para combatir a la informalidad y la evasión, otros remarcan sus riesgos potenciales y consideran su implementación como “una amenaza para la libertad económica de las personas”.
¿Qué características tiene una CBDV?
En concreto, una Moneda Digital de Banco Central (CBDC, según sus siglas en inglés) tiene como principal característica la posibilidad de reemplazar al billete en papel. Y aunque su origen está profundamente inspirado en las criptomonedas, lo que la diferencia de estas, además de las creadas por entidades privadas, es que su emisión está centralizada y respaldada por el Estado y la misma es de curso legal. Esto simboliza que debe ser aceptada, de manera forzosa, tanto por el sector público, para el pago de impuestos, por ejemplo, como por el privado, para la compra de bienes y servicios.
Además, su valor se establece del mismo modo que ocurre en el caso de la moneda convencional y es volátil a los tipos de cambios oficiales.
En resumidas cuentas, la implementación de una moneda digital en Argentina sería como tener un billete pero al que sólo se podría acceder a través de una Wallet, mediante el celular o plataformas digitales, sin la necesidad, o posibilidad, de tener su versión física.
Moneda digital argentina: de qué se trata el proyecto surgido durante el debate presidencial
Según explicó el titular de la cartera económica, la iniciativa “busca impulsar el uso de los medios de pago digitales, formalizando las cadenas de pago y disminuyendo el uso del efectivo”, además de “facilitar las operaciones digitales a personas y empresas a partir de la simplificación financiera, reduciendo impuestos y comisiones y permitiendo mayor libertad y autonomía a la hora de realizar transacciones en lo cotidiano, incluyendo sectores no digitalizados ni bancarizados y evitando la burocracia financiera“.
¿Qué países debaten usar una moneda digital?
Hasta la fecha, esta iniciativa se ha debatido en 105 países; sin embargo, y según un reciente informe de VisualCapitalist, solo en el 9% de las naciones donde se evaluó esta posibilidad se pudo llevar adelante una aplicación efectiva.
De entre las que sí pudieron hacerlo, se encuentran, por mencionar, Nigeria, Las Bahamas, Jamaica, Anguila, Antigua y Barbuda, República Dominicana, Santa Lucía y Granada. En el resto, o se encuentra en prueba piloto, como puede ser Rusia, Corea del Sur y Arabia Saudita, en etapas de desarrollo, como ocurre en España, Países Bajos e Israel, o apenas iniciaron el proceso de investigación, tal y como sucede en Estados Unidos, México y Chile, entre otros.
Pros y contras de crear una Moneda Digital: la palabra de los expertos
Guillermo Escudero, Director Global de Alianzas Estratégicas y Gerente Regional de CryptoMarket, resaltó que las ventajas de implementar una MDA serían “una mayor velocidad de acreditación de transferencias que otros medios tradicionales, menores costos operativos y mayor transparencia“, entre otros aspectos.
Además, remarcó que “si todos los pagos se digitalizan, habría una mayor facturación por parte del sector privado” y, por ende, “mayor recaudación fiscal por el Estado” lo que, a su vez, consideró, colaboraría con otro de los objetivos de Sergio Massa en su paso por el ministerio de Economía, y en el desarrollo de su plataforma electoral, que es luchar contra el déficit fiscal.
Mientras que Ramiro Raposo, VP of Growth de Bitwage, plataforma pionera en pago de honorarios en criptomonedas, principalmente elegida por freelancers y exportadores de servicios, aseguró que “en un país donde abunda el flujo de dinero en efectivo, como lo es Argentina, la creación de una CBDC puede ayudar a agilizar el flojo de capital“.
Sin embargo, reveló que una de las grandes preocupaciones de este tipo de monedas está relacionada con la privacidad. “No estamos seguros hasta qué punto se va a respetar lo que el Banco Central puede saber de nuestras transacciones o movimientos de dinero. O si el Gobierno va a tener la capacidad tecnológica y la seguridad para proteger la red donde se manejen estas monedas“, argumentó, en diálogo con PERFIL.
Cómo evitar caer en una estafa con criptomonedas
En esta línea, opinó Jeremías Rucci. El Project Manager de la Fundación Bases, y especialista en activos digitales, sostuvo que, pese a disponer de algunas ventajas, como puede ser la lucha contra la evasión o la informalidad laboral, “uno dejaría de ser dueño de su dinero”. En este sentido, fue tajante al advertir que la digitalización del salario y los ingresos individuales “son la gran amenaza del Siglo XXI”.
“En Argentina vivimos una época tan oscura como fue el Corralito y acá no tenemos garantías de que el gobierno de turno, sea del color que sea, no se quede con los depósitos. Ahora, se requeriría un solo click para hacerlo. Entran al sistema, tocan un botón y se quedan con tu plata”, expresó.
En este sentido, utilizó a China, uno de los principales aliados comerciales del oficialismo, como ejemplo: “Gracias a la implementación de un yuan digital crearon un sistema de clasificación de puntos donde, por ejemplo, si comprabas muchos videojuegos te podían quitar dinero. Con esto se puede limitar la libertad de las personas. En manos equivocadas puede ser muy peligroso”, enfatizó.
Por último, concluyó: “Nosotros le hemos dado anteriormente al Estado parte de nuestra libertad para garantizar la seguridad, pero darle el poder de nuestro dinero creo que es el máximo grado esclavitud al que podemos llegar. Es directamente el Gran Hermano de George Orwell ‘1984’“.
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Estará por verse cuál será el futuro de la Moneda Digital Argentina. Lo cierto es que, mas allá de las aspiraciones del ministro de Economía, de momento esta iniciativa no es más que un tópico de debate, uno más en medio de este más que movido contexto electoral, que llegará en los próximos días al Congreso.
Sin embargo, pareciera ser una temática lo suficientemente compleja como para que su discusión en profundidad, ya avanzando a un plano legislativo, se de en la antesala del cierre de un mandato, para Alberto Fernández, y de un ciclo, para Sergio Massa, llegue o no este último a imponerse, junto a Unión por la Patria, en las próximas elecciones generales.
Un tema del que hay más declaraciones que precisiones y más dudas que certezas sobre la manera en la que se implementaría, a quiénes alcanzaría, de qué manera se llevaría adelante y cómo, sobre todo, se protegería la privacidad y los ingresos y ahorros de los argentinos.
LR